Emilia nació en Mendoza y a los cuatro años se vino a vivir a Buenos Aires con su familia.

En la escuela sufrió bullying y fue discriminada por su color de piel y por la nacionalidad de sus padres (son bolivianos). Llegaron a sufrir tantas necesidades económicas que durante mucho tiempo durmió sobre una cajón de manzanas en una verdulería.

Una vez terminada la secundaria empezó a hacer un curso de Maestro Mayor de Obras. Como le costaba encontrar un trabajo relacionado con todo lo que estudiaba - el sector de la construcción está hipermasculinizado- , decidió probar suerte en el exterior de una manera diferente: imprimió en un papel el nombre de varios países, los recortó, los puso en una bolsita y sacó uno de ellos al azar: le tocó Croacia. Allí estudió Arquitectura y trabajo como personal de limpieza durante dos años. Finalmente tuvo que volverse a la Argentina porque no encontraba oportunidades.

Actualmente estudia Ingeniería Civil en la UBA y gracias a la gestión de #Potenciate consiguió trabajo en el área de Laboratorio de Loma Negra, una empresa con mayoría de hombres pero donde hoy está haciendo su propio camino y creciendo profesionalmente.